Adelanto de calabozo: Trono del Triunvirato

Otrora el centro de poder de los eredar, el Trono del Triunvirato, abandonado hace mucho tiempo, se encuentra completamente cubierto por la presencia del Vacío y su Guardia de las sombras. Dentro de los salones de este calabozo, encontrarás nuevos desafíos para superar y descubrirás el trágico destino de uno de los aliados naaru más preciados por los draenei.

Ubicación: Argus
Dificultades: Heroica y mítica
Nivel: 110
Jefes: 4

Como escenario, el Trono del Triunvirato está más arraigado en la historia de Warcraft que cualquier otro calabozo a este lado de Karazhan. Para crear la región de Mac’Aree en Argus, el equipo ansiaba explorar la historia trágica de los eredar que llevó a la caída de Argus, y también era una oportunidad para que los jugadores se distanciaran un momento— narrativa y visualmente— de las fuerzas demoníacas de la Legión como los principales antagonistas. Tal como habíamos visto en los eventos de la Fuente del Sol, hay una delgada línea que divide la dualidad opuesta de la Luz y las Sombras, y una dinámica similar se ha desarrollado en este lugar abandonado. En este calabozo los jugadores también podrán conocer mejor a Alleria Brisaveloz y la verán descubrir más sobre sí misma…

Zuraal representa el primer experimento exitoso de la Guardia de las sombras para crear un tábido imbuido con energías del Vacío cuya mente no ha cedido ante la locura. Zuraal era un luchador reconocido en su vida pasada y usa su nueva fuerza oscura para potenciar sus ataques y exterminar a sus enemigos.

El estratega Saprish despliega el ejército de la Guardia de las sombras con precisión quirúrgica. A pesar de ser un comandante y estratega muy habilidoso, Saprish disfruta intervenir en las batallas. Aprovecha las debilidades de sus enemigos y las usa en su contra para dejar a sus adversarios vulnerables y a merced de sus mascotas voraces.

Al igual que otros de su clase, el Virrey Nezhar tiene una obsesión por aprovechar el poder del Vacío para satisfacer sus propias ambiciones. Atraído hacia el Trono del Triunvirato por la oscuridad inmensa que emana de sus profundidades, Nezhar no se detendrá hasta apoderarse de él. Teniendo en cuenta los experimentos del virrey, que imbuía navíos con energía de las sombras, las consecuencias de sus posibles logros en Argus serían sin duda nefastas.

Cuando Velen y sus seguidores huyeron de Argus a bordo del Genedar, la naaru L'ura se quedó para darles a los draenei tiempo de escapar. Enfurecido por esta traición, Kil'jaeden ordenó que encerraran a la naaru herida en el Trono del Triunvirato. Miles de años pasaron, y L'ura cayó ante el Vacío. Su canción elegante de valor y esperanza se convirtió en un réquiem sombrío de desesperación que acecha a todos aquellos que intentan quedarse con su poder.